Amigos son aquellos extraños seres que nos preguntan como estamos y se esperan a oír la contestación.
Ed Cunningham
Hace tiempo un amigo que practica la lucha libre profesional me platicaba como en su momento más oscuro, despertando en un hospital después de haber intentado quitarse la vida, allí estaba él, su amigo, su ex-entrenador, llorando al lado de su cama. La historia que sucedió después fue de redención, donde las palabras de su amigo fueron escuchadas con el corazón, con la certeza que su consejo era sincero.
Y es allí, en esos momentos claves que se prueba la verdadera amistad. Pues para algunos los amigos son contactos, puertas para algunos lugares, sólo conocen lo superfluo, lloran y ríen cada quien por su parte. Pero para otros ellos son nuestros hermanos, hijos de otra madre, lloramos su dolor de cerca, conocemos lo que dicen con los ojos, lo que ríen cuando no hay nadie.
En la oscuridad se prueba lo que se dijo en la luz, así mismo la amistad se prueba cuando lo que se dijo se lleva a cabo en los momentos en que somos más vulnerables. En la fidelidad que ve más allá de los intereses personales.
¿Quiénes son aquellos que nos frecuentan y qué obtienen de nosotros al final? ¿en verdad hay un interés sincero o buscan algo más? ¿Cómo saber si puedes contar con estos amigos en momentos claves de tu vida? Preguntante honestamente:
- ¿Me siento incluido en la conversación? ¿me pregunta acerca de mis intereses personales y salud?
- ¿Cuándo fue la última vez que sólo salimos para pasar el rato y no para que lo ayudará a hacer algo?
- ¿Hasta dónde puedo contar con él o con ella?
Podrás y deberás hacer más preguntas, directas, honestas, para probar la amistad, sin embargo, deberás aplicarlas las mismas preguntas hacía ti mismo, ¿eres tú ese amigo que exiges de otros? o ¿eres el centro de atención en la conversación sólo buscando a otros para tus intereses personales?.
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