Quiero tener un plan para amarte,
decidir darte más que palabras y a la aventura de aprender juntos invitarte.
Deseo ser quien tome tu mano de por vida,
susurrar cada mañana a tu oído que mi corazón no olvida,
esa larga y deliciosa espera,
que forjó mi sentimiento a valorarte cual bella, cual inigualable, cual tierna.
Anhelo enfrentar nuevos dragones, ahora contigo,
tomar la espada de cada rema y encajarla en su centro mismo,
quemar puentes cruzados y disfrutar lo nuevo, lo fresco, lo incierto.
Quiero deletrear tu nombre locamente,
valorar cada vocal y consonante que te describen con todas tus virtudes en mi mente.
Permíteme dibujar en tu rostro sonrisas de peleas propias ganadas,
buscando tu paz, tu anhelo por más, tu sensación de vivir una historia sin igual.
Escribirte poesías,
que hagan eco en mi manera de conducirme y decirte mía,
Porque quiero quererte, por siempre, por lo que eres,
importándome la manera en que ves las cosas, en que las percibes, en que las sientes.
Quiero vida mía quererte,
Quiero hermosa mía aprender a ser el hombre que no vive de palabras solamente,
sino de una demostración continua, reflejada en mi amor, mi respeto, mi fidelidad por siempre.
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