¿Cómo desarrollar una conexión genuina con los adolescentes en nuestra vida?

«Si pudieras preguntarle cualquier cosa a Dios, sabiendo que Él te respondería inmediatamente, ¿qué le preguntarías?». La joven escuchó la pregunta de su líder y respondió: «¿Lo que sea?… Bien, yo le preguntaría: ¿Por qué mi papá hizo lo que hizo? Mi mamá nunca quiere hablar de eso, y solo sé que todos estos años él ha estado en prisión. No entiendo qué lo llevó a hacer algo tan horrible».

¿Cómo respondes a este tipo de conversaciones? O quizás sería mejor preguntar, ¿cómo poder desarrollar una relación autentica con adolescentes para lograr entablar este tipo de conexiones en las que ellos sientan la confianza para compartir lo más profundo de su corazón y poder ayudarlos?

¿CUÁL ES EL PULSO DE ESTA GENERACIÓN HOY EN DíA

Recientemente la organización Cristiana con la que trabajo, Young Life llevo a cabo un estudio estratégico entrevistando a más de 7,200 adolescentes alrededor del mundo con el fin de comprender mejor a la Generación Z y Alpha. De lo más sobresaliente que encontraron es que los chicos desean adultos en sus vidas que sean auténticos, con los que se puedan relacionar fácilmente y quienes no teman mostrarse vulnerables.

“Algo que los adolescentes buscan en los adultos en sus vidas es que simplemente Sean ellos mismos. Adolescentes y jóvenes desean relaciones auténticas, simple y sencillamente eso.” ¿Qué significa esto para generaciones más adultas? ¿Cómo podemos cultivar autenticidad en nuestras interacciones con los chicos?

Algunos descubrimientos claves de esta encuesta:

¿CÓMO PODEMOS INVERTIR EN ESTA GENERACIÓN?

1. SIENDO VULNERABLES

Una de las maneras más poderosas de mostrarnos auténticos es al permitirnos ser vulnerables. Los jóvenes aprecian grandemente cuando los adultos comparten sus retos, temores e inseguridades. Es ahí que creamos espacios sanos donde ellos también pueden compartir sus experiencias y problemas de una manera honesta. 

En la Escritura, David se muestra vulnerable y abre su corazón diciendo “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis ansiedades. Fíjate si voy por un camino que te ofende y guíame por el camino eterno.” (Salmos 139:23-24)

Mostrarse vulnerable puede ser tan sencillo como compartir alguna experiencia personal en la que conquistamos alguna adversidad confiando en el Señor o admitiendo honestamente que no tenemos todas las respuestas. Esto puede ser algo incomodo al principio, pero es esencial para desarrollar relaciones claves. Nos permite conectarnos de una manera más profunda uno con el otro. ¡Y esto vale la pena!

2. ESCUCHAMOS, NO JUZGAMOS

Una de las cosas que acaban rápido con una buena una conversación con un adolescente es cuando se siente sermoneado por un adulto. Esta generación anhela saber que los adultos en sus vidas realmente los están escuchando.

Apresurarnos en ofrecer un consejo o soluciones es la tendencia para muchos de nosotros. Pero la próxima vez que un chico comparta algo contigo, intenta tomar el tiempo de escucharlo completamente en todo lo que tiene que decir. Resiste la urgencia de imponer tus propias opiniones al respecto. Si lo haces, es probable que logres escuchar algo que te hubieras perdido si hubieras interrumpido antes. 

Santiago nos dice “Mis queridos hermanos, tengan presente esto: Todos deben estar listos para escuchar, pero no apresurarse para hablar ni para enojarse.” (Santiago 1:19 NVI)

Y por supuesto, hay un tiempo y lugar para ofrecer consejo sabio y aún disciplina. Sin embargo, lograrás ganar una confianza más profunda al demostrar un interés genuino y empatía al principio. Sé rápido en escuchar y lento para hablar y lograrás desarrollar conexiones significativas.

3. SÉ GENUINO

Los chicos pueden detectar a 1 kilometro de distancia cuando alguien trata de aparentar algo que no es. Es tan importante ser genuino en tus interacciones con ellos. Esta generación esta en busca de adultos que no intenten ser alguien que no son, sino quienes se muestren tal y como son. 

De la misma manera los adolescentes valoran cuando alguien es vulnerable, admiran adultos que no tienen miedo de ser ellos mismos. Este tipo de personas son como una brisa de aire fresco. Quienes brindan un espacio seguro donde los chicos pueden ser ellos mismos.

Si esto se siente algo intimidante, recuerda: Dios te ha dotado de una personalidad única. Lo que Él te ha permitido experimentar a lo largo de tu vida es increíble y estos jóvenes necesitan adultos que sean lo que dicen ser.

Alguien autentico cosecha autenticidad. Esta generación esta más que dispuesta a abrir su corazón hacía adultos que sean sinceros y genuinos. Pablo habla de esto en Romanos 12:9, “El amor debe ser sincero. Aborrezcan el mal; aférrense al bien.”

Adolescentes hoy en día tienen hambre de cosas genuinas. Desean saber que los adultos en sus vidas, así como ellos, siguen aprendiendo cosas nuevas. Esto los hace sentir un poco menos solos en medio de tanta incertidumbre.

Así como tú interactúes con adolescentes, confía que ellos preferirán ver las partes de tu vida que no son tan relucientes. Ellos quieren sentir que eres como ellos, alguien que todavía tiene mucho que aprender. 

4. RESPETA SU INVIDIDUALISMO

De la misma manera que tu personalidad y experiencias de vida son únicas, no olvides que cada joven también es una persona única. Es importante respetar el individualismo de esta generación evitando prejuicios o suposiciones basadas en estereotipos o ideas preconcebidas.

Toma tiempo para conocerlos como individuos mostrando un interés genuino en sus pasatiempos, metas y sueños. Al hacer esto, celebras y reconoces lo único de su personalidad y creas lazos fuertes con ellos.

El Salmo 139:24-25 nos recuerda esto mismo “Tú creaste mis entrañas; me formaste en el vientre de mi madre. ¡Te alabo porque soy una creación admirable! ¡Tus obras son maravillosas y esto lo sé muy bien!

Eres alguien maravilloso, así como los adolescentes en tu vida. !Eso es algo digno de ser constantemente celebrado!

5. DIRIGE CON TU EJEMPLO

Lo que haces habla más fuerte que lo que dices, por eso dirigir con nuestro ejemplo es una de las maneras más efectivas de mostrar autenticidad. Los chicos buscan este tipo de personas confiables y consistentes. Esto significa ser honesto y transparente y aceptar cuando nos hemos equivocado. 

Un estudio publicado por el Instituto Nacional de Salud en Estados Unidos muestra como el contar con un modelo a seguir sólido puede cambiar la vida de un adolescente. Aquellos que tuvieron un adulto en su familia en quien confiar tomaron mejores decisiones en la vida, mostraron más alto interés en su educación y así como niveles de felicidad mucho más altos. Jesús mismo mencionó esto en Juan 13:15 “Les he puesto el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes.”

Las siguiente generación seguirá la influencia de alguien, sea que éste sea un buen ejemplo o no. Es por esto que los jóvenes necesitan ejemplos que valga la pena imitar. ¡Cuando tú guías con tu ejemplo inspiras a esta generación a hacer lo mismo!

6. DISPUESTO A SEGUIR APRENDIENDO

Admitir que seguimos aprendiendo es humildad, así también lo es el abrirse a nuevas perspectivas e ideas. Disponte a entablar conversaciones intencionales con los chicos. Muestra curiosidad acerca de sus experiencias y puntos de vista. Dale la bienvenida a platicas fuera de tu área de conocimiento y aprende de ellos también. 

Autenticidad es aprender a que no tengo todas las respuestas, pero estoy dispuesto a aprender de otros. Proverbios 1:5 nos dice “Escuche esto el sabio y aumente su saber; reciba dirección el entendido.” 

¡Hay mucho que podemos aprender de esta nueva generación (más allá de las nuevas actualizaciones del iPhone)!

7. CREANDO CONEXIONES CLAVES

Conexiones claves toman tiempo. Pero al invertir en conocer a los adolescentes de una manera más profunda les muestras que realmente ellos te importan. Tu consistencia les comunica que eres alguien que esta listo para apoyarlos en su vida. Sea a través de una mentoría, entrenando en algún deporte o simplemente prestando tu oido, tu presencia tiene un impacto profundo en sus vidas. 

1 Tesalonicenses 2:8 encapsula esto mismo: “Así nosotros, por el cariño que les tenemos, nos deleitamos en compartir con ustedes no solo el evangelio de Dios, sino también nuestra vida. ¡Tanto llegamos a quererlos!.”

Si después de leer esta lista sientes que es demasiado, comienza una lista propia. Recuerda, ellos no necesitan más adultos que parezcan saberlo todo. Ellos necesitan modelos a seguir que les den seguridad, auténticos, quienes realmente se interesen por sus sueños y se preocupen por sus problemas y complejidades que vienen con la adolescencia. Por eso, así como aspiramos a desarrollar relaciones genuinas con esta generación, hagámoslo con corazones llenos de amor, humildad y autenticidad.